Nata 1 pote
Harina común 1/2 pote
Harina leudante 1/2 pote
Azúcar c/n
Preparación:
Colocamos la nata en un bol. Debemos conservar el pote en el que viene, ya que este nos servirá para medir el resto de los ingredientes. Agregamos ambas harinas, medidas con el pote de nata. Mezclamos hasta formar una masa.
Espolvoreamos la mesada con azúcar para que la masa vaya tomando sabor. Estiramos la masa hasta que nos quede de 5 milímetros de grosor. Para lograr mayor prolijidad, podemos recortar los bordes.
Enrollamos un lado de la masa hasta el centro de la misma. Repetimos el procedimiento con el lado opuesto.
Cortamos las palmeritas de medio centímetro de grosor y las pasamos por azúcar de ambos lados para que se caramelicen.
Colocamos en una placa limpia, sin manteca porque las galletitas al tener nata evitarán que se peguen. Debemos dejar cierta distancia entre cada una de ellas porque en el horno se expanden.
Llevamos al horno a 200°C hasta que se doren y damos vuelta para que se doren del otro lado.
Secretitos:
Si la masa está muy blanda por el calor, podemos llevarla un rato al freezer o a la heladera para que nos sea más fácil de trabajar y lograr su forma característica.
Al retirar del horno, las colocamos sobre una rejilla para que se aireen y queden bien sequitas y crocantes.
Si queremos lograr un sabor más agridulce, podemos colocarle apenas una pizca de sal a la masa.
¡Terminadas nuestras palmeritas dulces para compartir con quien más queramos! Una opción que definitivamente no te puedes perder.
